Harta ya de estar harta
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*Captura tomada del video de un supermercado extranjero*
No sé si estoy harta de ser vieja o de que haya tanto imbécil suelto.
De vuelta a mi ca...
Hace 6 días
12 comentarios:
Aspira,aspira,aspira largo y profundo ahora!!!!!!! y guardala en el frasquito de tu corazon!!!!!!!!!!!!!
Se puede…es cosa de proponerselo y confiar.
Me encantan los frasquitos!
La palabra frasquito es en sí atractiva: lo que se encierra allí no puede ser sino un aroma, un secreto bien guardado, o un instante precioso. Aunque a la vista no haya nada.
Camulus, JJ, gracias por pasar!
¿Y si nos ponemos una fábrica y la envasamos en frasquitos satinados?¿te animás?
¿Pensaste en si hay mercado para el producto? Habría que hacer un estudio. Para que producir felicidad en cantidades industriales, si luego no habrá interesados en consumirla...
Yo empezaría por una empresita familiar casera...Y frascos satinados...hummm, no. Ya sabés que prefiero lo rústico.
Yo estoy de acuerdo con Tuma. Guárdala dentro. Tú eres el frasquito. La felicidad sólo se puede guardar en recipientes adecuados, y los recipientes adecuados para la felicidad somos los seres humanos... Deja los frasquitos para los perfumes, la miel y la mermelada. Para eso son geniales.
Y...sí. Pero la metáfora del frasquito es bella, ¿no?.
toma natalia, un pequeño regalo...
http://www.yousendit.com/transfer.php?action=download&ufid=989603942AB39BD8
pascal comelade es un músico catalán que suele hacer música con todo tipo de objetos, incluidos los juguetes...
me gustó tu interpretación...
sobre la felicidad... se escapa de nuestro control, y esa debe ser la gracia, quizás...
besos!
Xavi: te lo digo también acá, gracias. Pascal Comelade ya está en mi carpeta de música, y con él el mundo nuevo que se abre cada vez que se descubre un artista.
Quien pudiera no???
Pero la felicidad es cosa de momentos diria Sabato...
Y si yo tmb creo que si vivieramos en una eterna felicidad terminariamos aburriendonos...
Lo mejor el equilibrio. Aunque cueste...
Yo creo que hay momentos que por su intensidad permiten "envasar" emociones en virtuales frasquitos conservadores.
La felicidad eterna y completa sabemos que no existe.
Pero esa reserva quizás sirva para sostenernos mientras duran esos otros tiempos en los que la alegría, la paz, o incluso los abrazos, escasean.
¿será eso el equilibrio?
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